lunes, 20 de octubre de 2008

Sí, yo quería ser esa mujer, la madre de tus hijos, y juntos caminar hacia el altar, directo hacia la muerte. Y al final, ni a hablar, los dos nos destruímos. Y al final, ¿qué tal? tú y yo ya no existimos. No, no quiero ser esa mujer, ella se fue a un abismo. Tú no eres aquel que prometió, sería mi superheroe. Y que todo acabó, no queda más; seremos dos extraños. Yo te olvidaré, me olvidarás; hasta nunca. ¿Y dónde quedó ese botón que lleva a la felicidad? Luna de miel, rosa pastel, clichés y tonterías. Y al final, ni a hablar, los dos nos destruímos. Y al final, ¿qué tal? tú y yo ya no existimos. No, no quiero ser esa mujer, ella se fue a un abismo. Tú no eres aquel que prometió, sería mi superheroe. Y que todo acabó, no queda más; seremos dos extraños. Yo te olvidaré, me olvidarás; hasta nunca.

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