jueves, 20 de noviembre de 2008




Sí, claro que estoy llorando, ¿o es que acaso esperabas que hiciera una fiesta como

despedida? y aplaudir que te vas, destrozando mi vida, o que al irte me vaya corriendo a la Iglesia a pedirle a Dios que te bendiga. No, no podré perdonarte, a pesar que te amo con toda mi alma me obligas a odiarte. Hoy te ríes de y no te duele dejarme, pero vas a volver a buscarme y te advierto que voy a vengarme. Vas a besar el suelo, por Dios, te lo juro. Vendrás a pedirme perdón y lo dudo. Y mendigarás por un beso a mis labios, tus piel rogará que la toquen mis manos. Sé que voy a gozar cuando vengas llorando, y voy a burlarme de verte arrastrando. Te arrepentirás de haberme conocido porque hoy me declaro tu peor enemigo. Y lo que te mereces por abandonarme es que al volver te mande

A CHILLAR A OTRA PARTE.


No hay comentarios: